No es lo mismo existir que vivir, existe un pequeño matiz en ambas palabras que las diferencian sustancialmente. Vivir es crecer, tener experiencias y tener activos los sentidos. Existir es simplemente esperar, ver el mundo pasar sin una actitud activa. Para vivir, hay que actuar, hacer que nuestra vida valga la pena, y para conseguirlo necesitamos desarrollarnos personalmente, crecer en nuestro interior.
El crecimiento personal es el que nos permite ser mejores personas, sacar la mejor versión de nosotros mismos. Si estás harto de ver como nada te motiva, si quieres encontrar un sentido a tu vida, ha llegado el momento de que te dejes guiar por tu instinto y busques el desarrollo personal y el crecimiento. En general, el desarrollo personal se basa en la búsqueda incansable de tus deseos más profundos, de luchar por tus sueños y tener una motivación rica y viva.
La gente que quiere desarrollar su interior y crecer a nivel personal, suele hacer muchas actividades de meditación y relajación. El Yoga y los Pilates, así como todas esas actividades del New Age que te permitan conectar con tu cuerpo y mente, son actividades perfectas para buscar el sentido de la vida, la felicidad más absoluta que se esconde en el poder de las pequeñas cosas.
Crecer y desarrollarte de forma personal tiene que ver también con la renuncia de las cosas materiales. Se ha acabado anteponer la búsqueda del placer y del dinero por encima de las experiencias más sencillas como pueden ser disfrutar de un paseo por la naturaleza o tiempo libre para hacer las cosas que te gustan. Dicen que el dinero da la felicidad, pero no es cierto, lo único que te conecta con la felicidad de tu interior es el tiempo que tienes para disfrutar del tiempo libre con la gente que quieres. Sólo así conseguirás un verdadero desarrollo y crecimiento personal.